domingo, 27 de abril de 2014

Cruelmente herido

En un lugar, no muy lejos de donde tú podrías estar, alguien, hace muy pocos minutos, acaba de ser herido de muerte.
Como si le hubieran atracado y hubiera sido arrebatado del privilegio de vivir, yace muerto en el suelo...
Como si de un soldado herido en combate se tratara, yace muerto en el suelo...
Como si acabara de sucumbir gravemente enfermo, yace muerto en el suelo...
Cansado, atormentado, desgraciado, entristecido, pero sobre todo herido, cruelmente herido, horriblemente herido.
Y es que está sufriendo la peor de las formas de morir. Está sufriendo un castigo inhumano. Acaba de ser herido de muerte por una simple frase. Acaba de escuchar un terrible conjuro que le ha hechizado el cuerpo y lo ha arrebatado de todo el sentido. Acaba de escuchar sólo cuatro palabras.
Acaba de escuchar  "ya...no... te... quiero..." de labios de su amada.